Actualmente, atraer e incorporar talento joven a nuestras organizaciones, se ha convertido en un verdadero reto, en una difícil labor que exige de mucho esfuerzo, principalmente porque los jóvenes no se sienten atraídos por nuestras ofertas de empleo y nuestras empresas.

El talento joven sabe donde desea y donde no desea trabajar, y en muchas ocasiones no cree encontrar en nuestras empresas lo que necesita a la hora de comenzar su andadura profesional o el lugar en el que desarrollarse profesionalmente.

Los jóvenes no se sienten atraídos por las ofertas de empleo de las empresas

Un reciente estudio de Llorente y Cuenca (“Perfect Match – Reacciones de los jóvenes a propuestas reales de captación de talento”), afirma que cómo les hace sentir la descripción de una oferta de empleo, es un aspecto importante para el 60% de los jóvenes a la hora de elegir una empresa. También que para el 90% de ellos, la credibilidad que le provoca el contenido de la oferta y la información que obtienen sobre la empresa sigue siendo un factor fundamental a la hora de escoger empleo.

Los jóvenes buscan cercanía en la forma de comunicar de las descripciones de nuestras ofertas de trabajo, buscan ofertas que conecten con ellos. Demandan que las empresas demuestren con hechos lo que éstas les cuentan sobre ellos y su propuesta de valor en sus jobs descripcion y páginas de empleo corporativas. Y por otro lado, buscan información de una empresa en internet antes de decidirse a inscribirse en sus ofertas de empleo o enviar su currículum.

Todo esto hace que publicar ofertas de empleo y esperar que el talento joven se inscriba en ellas, se convierta en una misión imposible.

Los jóvenes deciden dónde quieren o no trabajar

La generación Z, los jóvenes nacidos entre 1995 a 2015, son la última generación que se ha incorporado al mercado laboral, y tienen claro lo que esperan de una empresa como lugar en el que trabajar.

Otro reciente estudio, elaborado por Buzzinn y Mind the Gap (“Cómo tratar con un Z – Las claves para tu empresa si no quieres morir en el intento”), expone aquello que los jóvenes buscan en una empresa:

Empresas alineadas con sus propósitos personales y valores.
Organizaciones líquidas, que se adapten al cambio, que sean flexibles. Menos jerarquizadas y más horizontales. Empresas que les permitan trabajar desde cualquier lugar.
Empresas transparentes en procesos internos, resultados y estado general de las mismas, para poder sentirse partícipes de lo que sucede.
Organizaciones que les permitan aprender en equipo y tener la posibilidad de recibir feedback continuo.
Empresas que respeten sus momentos non-negotiable, horas sagradas para el empleado, directamente relacionadas con actividades ajenas a la empresa para su propio bienestar.

Y con este panorama, ¿cómo podemos conseguir atraer e incorporar talento joven a nuestras organizaciones?

La FP Dual, se ha convertido en un gran aliado para ello, permitiendo que alumnos/as en prácticas de Formación Profesional conozcan nuestra empresa desde dentro, y deseen trabajar posteriormente en ellas. Una fuente de reclutamiento en auge que además nos reporta innumerables beneficios.

4 Beneficios de la FP Dual como fuente de reclutamiento

Match Candidato-empresa: Si hay algo que buscamos en todo proceso de selección los reclutadores y entrevistadores, es sin duda el encaje de las competencias necesarias para desarrollar un puesto de trabajo con las competencias que posee un determinado candidato/a.

Tener a un alumno/a en prácticas de FP Dual nos ofrece una mayor fiabilidad del ajuste del perfil competencial de la persona con el perfil competencial requerido en un puesto de trabajo, gracias a que durante un año completo tenemos la posibilidad de evaluar las competencias, habilidades y motivaciones profesionales del alumno/a. Además de permitirnos orientar y guiar mejor a este/a en el aprovechamiento de su talento, identificando por ejemplo el área de la empresa en la que encajará mejor para desempeñar y asumir las tareas y responsabilidades de un puesto de trabajo.

Por otro lado, tener alumnos de FP Dual en nuestras empresas, nos permitirá anticiparnos a las necesidades de contratación que pueden surgir a corto plazo, gracias a que hemos podido evaluar previamente la adecuación de un alumno/a a un puesto de trabajo y la empresa.

Cultura, valores y clima laboral: Como siempre digo, el éxito de una incorporación en la empresa no sólo depende de los conocimientos, las habilidades y competencias necesarias para desempeñar un puesto de trabajo, sino que requiere también de un último factor importante en la ecuación, los valores de un candidato/a.

Tener a un alumno/a en prácticas de FP Dual nos permite evaluar, a lo largo de varios meses, la alineación de los valores y cultura de empresa con los del alumno/a en prácticas. Además, nos ayuda a mejorar el clima laboral de las empresas, ya que la entrada de alumnos en prácticas supone abrir las ventanas y que entre aire fresco a nuestras compañías.

Mejora de la marca empleadora: La FP Dual nos ayuda a demostrar con hechos, a los alumnos/as en prácticas, todo aquello que la empresa puede ofrecer a un trabajador por el mero hecho de trabajar en ella, mejorando la imagen y reputación como buen empleador, como buen lugar en el que trabajar.

Ayuda a dar visibilidad a la apuesta por la diversidad generacional y el talento joven en una empresa.

Además, acoger a alumnos/as de FP Dual puede convertirse en un atributo de la Responsabilidad Social de las empresas, teniendo un impacto positivo sobre su imagen, gracias a su asociación del compromiso de la empresa con reducir la tasa de desempleo juvenil y evitar la migración de talento a otros países, cuando decidimos incorporar a esos alumnos/as como trabajadores.

Ahorro de costes: Tener alumnos/as en prácticas de FP Dual supone un ahorro importante de costes en la fase de reclutamiento de un proceso de selección de personal, ya que no se requiere realizar un proceso de selección completo, ni de la publicación y difusión de ofertas de empleo, cuando surge una necesidad de personal y un alumno/a en prácticas es idóneo/a para el puesto. El tutor de centro desempeña una de las labores más relevantes realizando la preselección de aquellos alumnos más adecuados para una determinada empresa.

Este ahorro de costes también tiene un impacto importante por la agilidad en la adaptación cuando posteriormente se realiza la contratación de un alumno/a que ha realizado sus prácticas con nosotros, gracias a que ese alumno/a en prácticas ha realizado el proceso de OnBoarding al puesto de trabajo y la empresa durante su periodo de prácticas.

Por último, no nos olvidemos de las Bonificaciones en las cuotas empresariales de la Seguridad Social al realizar su contratación, así como la bonificación adicional para financiar los costes de tutorización de la empresa si se realiza un contrato de formación y aprendizaje.

Como ves, convertir la FP Dual en la principal fuente de reclutamiento para atraer e incorporar talento joven a nuestras empresas, tiene múltiples beneficios que debemos aprovechar.

¿Qué opinas tú? ¿Has tenido alumnos/as en prácticas de FP Dual en tu empresa? ¿Han sido una fuente de reclutamiento joven para tu organización?

Víctor Candel

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Te invito a que le eches un vistazo a mi participación en el III Encuentro Nacional de FP de la Región de Murcia, un evento organizado por la Consejería de Educación y Cultura de la Región de Murcia, Dualiza Bankia y el Centro de Profesores y Recursos Región de Murcia, en el que pude hablar sobre la FP Dual como fuente de reclutamiento para la búsqueda y atracción de talento joven.